Familias Unidas Por Nuestros Niños

Alienación Parental

La Alienación Parental o Síndrome de Alienación Parental (SAP) es una patología psicológica (patología significa que no es normal y sus efectos son negativos) en la cual uno de los padres aliena al hijo contra el otro padre. En Uruguay en la mayoría de los casos el progenitor alienante es la madre. ¿Como lo hace? Hablando mal de padre directa e indirectamente constantemente. Con esto busca la implantación de falsos recuerdos y la creación de sentimientos negativos hacia el padre. Poco a poco el niño es alienado cada vez más no dándose cuenta de que real o falso y el mismo repitiendo las mentiras que ha escuchado mil veces. Finalmente se  da el rompimiento del vínculo con el padre, donde el niño, joven o adulto no quiere comunicarse con su padre y rechaza todo intento del padre para mantenerse en contacto.

He aquí algunos de los síntomas mas frecuentes (Fundación Filia)
  • Introversión y falta de comunicación: comienzan a encerrarse más en sus habitaciones, a no compartir las estancias comunes y volcarse mucho con sus iguales. Los tiempos de comunicación en familia se reducen y cualquier intento de hablar con ellos suele ser rechazado de forma desmesurada.
  • Ira, falta de control de impulsos y conductas inapropiadas.
  • Utilizan palabras y frases tomadas de los adultos.
  • El uso de la mentira de forma habitual.
  • Conductas regresivas para la edad evolutiva que tienen.
  • Verbalizaciones agresivas hacia los padres sin sentimientos expresos de culpa.
  • Manipulación en su forma de interactuar.
  • Sentimientos de culpabilidad y abandono.
  • Rechazo, impotencia e indefensión.
  • Inseguridad y estados de ansiedad y depresión.
  • Bajo rendimiento escolar y problemas de integración con sus iguales.
  • El menor pasa mucho tiempo en la calle, actitudes delictivas, consumo de drogas.
 

¿Cómo Sucede?

Sucede  luego de la ruptura conflictiva de una pareja cuando uno de los progenitores decide usar a los hijos contra al otro progenitor.  Se dan  dos series de hechos al mismo tiempo:se obstaculizan los encuentros con el otro progenitor y se meten sentimientos negativos constantemente en la cabeza del niño.

Para obstaculizar el tiempo con el progenitor y/o visitas cuando estas están establecidas judicialmente se recurren a todo tipo de estratagemas: falsas denuncias de maltrato, falsas denuncias de abuso sexual, el niño está enfermo, el niño está indispuesto, se fue a la casa de la tia, esta con un amigo, quédate en casa que esta por venir el primo, etc.

El crear una falsa imagen negativa es también  un trabajo de lavado de cerebro permanente: va desde lo directo como tu padre no te quiere y tu padre te abandonó a lo sutil como como te dejo tu padre comer tanto chocolate, si tu padre no se acuerda tu tenes que ponerte el sombrero para no quemarte, que lindo la camisa que te regalo tu padre pero te queda chica y muchos casos más.

Signos de Alerta

Estos son algunos indicadores típicos que permitirían detectar si existen síntomas del Síndrome de Alienación Parental con maltrato:
– Insultar o desvalorizar al otro progenitor en presencia del hijo, aludiendo cuestiones de pareja que no tienen nada que ver con el vínculo parental.
– Impedir el derecho de convivencia con sus hijos al otro progenitor.
– Implicar al entorno familiar y a los amigos en los ataques al excónyuge.
– Subestimar o ridiculizar los sentimientos de los niños hacia el otro progenitor.
– Incentivar o premiar la conducta despectiva y de rechazo hacia el otro progenitor (basta con que los niños vean que esa actitud hace feliz a la madre o al padre, para ofrecer su dolor y así reconfortar al adulto alienador).
– Influir en los niños con mentiras sobre el otro llegando a asustarlos.

En los niños, el Síndrome de Alienación Parental puede detectarse cuando intentan justificar el rechazo con explicaciones o razones absurdas e incoherentes. En ocasiones, también pueden usar diálogos o frases propias de su progenitor alienador, y palabras o comentarios impropios de su edad.

Fuente: http://www.guiainfantil.com/

  • Reconocer lo que está pasando y tener claro que luchamos contra el maltrato psicológico de nuestros hijos.
  • Buscar asesoramiento profesional, tanto en lo legal como en lo psicológico.
  • Buscar estar la mayor parte del tiempo posible con el niño y que este esté lo menos posible con el progenitor alienante.
  • Apoyar la custodia o tenencia compartida que entre otras ventajas hace muy difícil el progreso de la alienación parental.
  • Asistir y trabajar en Familias Unidas por Nuestros Niños para que este problema sea reconocido en nuestra sociedad.